Porque el mismo Señor descenderá del cielo con voz de mando, con voz de arcángel y con trompeta de Dios, y los muertos en Cristo resucitarán primero. Luego nosotros, los que estemos vivos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados junto con ellos en las nubes, a recibir al Señor en el aire. Y así estaremos siempre con el Señor. 1 Tesalonisenses 4:16-17
Un predicador visitó el país de Ruanda, el cual está situado en la mitad oriental del África. Mucha gente recuerda a esta nación por el terrible genocidio en el que perdieron la vida más de ochocientas mil personas en 1994. Y una noche, después de una predicación de las profecías bíblicas el ministro, se encontró a un niño de unos ocho años de edad. Con un tono de sentida tristeza en su voz, le dijo: “Señor, no tengo papá. ¿Podría usted ser mi papá?” Los huérfanos abundan en las calles de ese país. A menudo mendigan tratando de obtener unos pocos centavos con los cuales sobrevivir. Pero aquel muchachito recibió la siguiente respuesta: “Hijo, tienes un Padre celestial que es mucho mucho mejor que yo. Un día enviará a su Hijo Jesús para llevarte a su hogar. Nunca más te sentirás solo ni volverás a tener hambre, ni tampoco tendrás que vagar por las calles. Él te ama y va a volver para buscarte”. Se dieron un abrazo. El muchachito sonrió como diciendo: “Lo entiendo” Un débil rayo de esperanza penetró en la oscuridad de su vida. La esperanza del regreso de nuestro Señor levantó su ánimo. La segunda venida de Cristo es algo más que un gastado dogma religioso. ¿Por qué podemos tener la certeza de que Jesús vendrá?
Y después que me vaya y os prepare lugar, vendré otra vez, y os llevaré conmigo, para que donde yo esté, vosotros también estéis. Juan 14:3
Las profecías bíblicas mencionan el regreso del nuestro Señor unas 1500 veces. Como promedio, en el Nuevo Testamento, aparece una referencia cada 25 versículos. Por cada profecía del Antiguo Testamento que habla sobre la primera venida de Cristo, encontramos ocho que se refieren a la segunda. ¿Cómo Satanás va a tratar de confundir los acontecimientos que rodean a la 2ª venida de Cristo?
Y no es de extrañar, porque el mismo Satanás se disfraza de ángel de luz. 2 Corintios 11:14
Porque se levantarán falsos cristo y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, para engañar, si fuera posible, aun a los elegidos. Mateo 24:24
Cuanto más cercana está la venida de Jesús, mayor será la motivación de Satanás para engañar a la raza humana. A medida que pase el tiempo, el Enemigo estará más interesado en atraer a millones de personas con una falsa venida. Imagínate que se diera la noticia: ¡Cristo está en San Francisco, o en Ciudad de México, o en Buenos Aire o en Roma!. Las multitudes se acercarían por curiosidad o para ser curados de algún cáncer o de otra enfermedad. ¿Irías? ¿Cómo podríamos saber si se trata del verdadero Cristo? Alguien podría decir: “Oh, Satanás no puede hacer milagros. Así es como yo lo sabría” Y otros dirían: “Satanás nunca podría curar un cáncer o dar vista a los ciegos. Solo Dios puede hacerlo”. Pero no estés tan seguro. El libro de Apocalipsis advierte a la última generación que “ esos espíritus de demonios, que hacen señales”.(Apocalipsis 16:14) Si , el diablo puede hacer milagros, eso es lo que la Biblia dice. Y otro de los grandes engaños de estos tiempos, es que se ha popularizado la creencia de que Jesús regresará secretamente a la tierra y se llevará a sus seguidores al cielo. Esta teoría se le llama el Rapto secreto, el cual está fundado en un par de versículos bíblicos fuera de contexto ( Mateo 24:37-41 y 1 Corintios 15:51-53) . El origen de la enseñanza del rapto de algún modo se remonta a los tiempos de la Reforma, cuando la iglesia popular puso en marcha lo que los historiadores luego llamaron la Contrarreforma, para así combatir las enseñanzas de Lutero y de otros Reformadores. Después poco a poco se fueron incorporando nuevos elementos para acabar creando un conjunto de doctrinas que simplemente no figuran en la Biblia. ¿Cómo será la segunda venida de Cristo? ¿Qué tipo de evento será
Porque el Hijo del hombre vendrá en la gloria de su Padre, con sus ángeles, y entonces dará a cada uno según sus obras. Mateo 16:27
Mirad que viene con las nubes; y todo ojo le verá, aun los que lo traspasaron. Y todos los linajes de la tierra se lamentarán por él. ¡Así sea! ¡Amén! Apocalipsis 1:7
La teoría del rapto secreto se basa principalmente en los pasajes que hablan de que el Señor vendrá como ladrón en la noche. Estos pasajes de las Sagradas Escrituras lo que enfatizan es que debemos estar listos para algo en el que no sabemos el día exacto ni la hora exacta. Pero esos pasajes tomados aislada y superficialmente podrían ser el indicio de algo secreto. Pero el problema de esta teoría es que ambos pasajes aparecen junto a otros que hablan acerca del regreso de Jesús en medio de un brillante resplandor. ¿Cómo describe el apóstol Pedro la venida de Cristo?
Pero el día del Señor vendrá como ladrón. Entonces los cielos desaparecerán con gran estruendo; los elementos serán destruidos por el fuego. 2 Pedro 3:10
La segunda venida de Cristo es un hecho concreto e irreversible que Dios coloca al final de la pecaminosa historia de la humanidad. Es el final de una era y el comienzo de otra totalmente nueva. Pero de igual modo que no podemos cambiar nada después que un ladrón ha entrado en nuestra casa, tampoco los pecadores podrán alterar los acontecimientos después que Cristo haya aparecido en las nubes. Por eso no podemos postergar nuestra preparación para la segunda venida hasta que llegue el momento apropiado. Cuando Cristo descienda del cielo, nuestros destinos y nuestro futuro eterno quedarán sellados. De modo que es sumamente importante que cada uno de nosotros obedezca el plan de Dios, y que no basemos nuestra confianza en nuestras ideas, teorías o tradiciones que no están fundadas en la Biblia. La Palabra de Dios enseña que el regreso de nuestro Señor es el momento más trascendente en la historia de la humanidad, tanto para los creyentes como para los que no creen en Dios. ¿Cómo describen los escritores bíblicos la relevancia de este gran acontecimiento?
El que es injusto siga siendo injusto, y el sucio siga ensuciándose. El justo siga siendo justo, y el santo siga santificándose. Yo vengo pronto, y mi galardón conmigo, para dar a cada uno según su obra. Apocalipsis 22:11-12
Entonces los reyes de la tierra, los grandes y los ricos, los capitanes y los poderosos, y todo siervo y todo libre, se escondieron en las cuevas y entre las peñas de los montes. Y decían a los montes y a las peñas: Caed sobre nosotros, y escondednos de la vista de Aquel que está sentado en el trono, y de la ira del Cordero. Porque ha llegado el gran día de su ira, ¿y quién podrá quedar de pie? Apocalipsis 6:15-17
¿Qué debemos de hacer mientras esperamos la 2ª venida de Jesús?
¿Quién, pues, es el siervo fiel y prudente, a quien su señor puso sobre su familia, para que le dé el alimento a tiempo? Dichoso aquel siervo, a quien, cuando su señor vuelva, lo encuentre haciendo así… Pero si aquel siervo fuera malo, y dijera en su corazón: Mi señor se tarda en venir. Y empezara a herir a sus consiervos, y a comer, y beber con los borrachos; vendrá el señor de aquel siervo en el día que no espera, a la hora que no sabe. Mateo 24:45-46; 48-50
La Segunda Guerra Mundial comenzó oficialmente el 1 de septiembre de 1939. Pero los primeros disparos en realidad se habían intercambiado cinco días antes. Originalmente, Hitler había previsto lanzar un ataque a Polonia el 26 de agosto. La noche anterior varias unidades de combate estaban listas para lanzarse al ataque. Sin embargo, acontecimientos políticos de última hora forzaron a Hitler a posponer la invasión. El alto mando militar alemán tuvo que ponerse en contacto con cada una de las unidades de combate y decirles que aguardasen hasta nueva orden. Pero el mando no pudo comunicarse con uno de los grupos que atacó, y tomó algunos prisioneros. Cuando el capitán alemán vio que se había adelantado al ataque liberó a los prisioneros polacos y regresó a Alemania. Aquel ataque prematura puso manifiesto las intenciones de Hitler. Pero, por increíble que parezca, el gobierno polaco no interpretó las señales, y pasó por alto el incidente sin darle importancia Y el 1 de septiembre, la invasión alemana tomó por sorpresa a la nación polaca. Nosotros no podemos permitir que nos pasen desapercibidas las señales del gran acontecimiento que ha de poner fin a la historia. Jesús vendrá, ¿estás preparado?
